Tan importante como no tirar basura en la calle

En estos días discutiendo sobre un proyecto escuché un comentario que me ha mantenido ligeramente inquieto por varios días, a pesar de haberlo escuchado antes:

El océano es el mayor séptico del mundo


A pesar de que se habla mucho del calentamiento global y de los efectos que puede causar en los próximos años considero también importante hablar de la materia fecal (mierda) y su disposición final. Esto no es algo desagradable, es algo serio.

El océano contiene vida para eliminar parte de la contaminación biológica que se le vierte. La evaporación se convierte en el efluente, y parte de la materia se asienta o regenera para crear nueva vida. Un proceso natural pero que, como todos, necesita su tiempo para completarse. A pesar de esto, hay que considerar que los canales de entrada al mar en muchos casos son las aguas superficiales y subterráneas, las que ya son vías utilizadas por años y años, y que como las tuberías que conocemos pueden también tener desperfectos por el sobreuso o simplemente por cambios naturales.

Las cámaras sépticas o cámaras de infiltración/percolación son sistemas comunes, prácticos y fáciles de construir cuando no se dispone de sistema de alcantarillado –situación actual para más del 70% de la población mundial. Además ofrecen una filtración razonable, dependiendo de la condición del medio en la que son construidas. Pero al final terminan vertiendo el agua en cualquiera de las anteriores opciones.
No es que ahora tengamos que hacer un plan para reducir la cantidad de heces igual que la cantidad de gases de efecto invernadero, pero este tema debe interesar a cada uno que disponga de construir una fosa séptica o de percolación a fin de poner interés en la selección del mejor sistema, de procurar una buena construcción del mismo y –cuando posible– considerar adicionar algún elemento adicional para la mayor depuración del efluente (sea cloro o hasta carbón activado).

Sería una acción tan importante para un ciudadano común como no tirar basura en la calle.

[Recordemos que además el “sistema global de aguas” recibe: fertilizantes, insecticidas y herbicidas, desechos de comida procesada, (VOCs) componentes orgánicos volátiles como los solventes industriales, (DNAPLs) líquidos densos no solubles en agua como solventes clorinados, hidrocarburos derivados de petróleo, detergentes, otros componentes químicos encontrados en productos higiénicos y cosméticos, residuos de metales pesados, ácidos y otros productos químicos industriales, entre otros].

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