Hacia la Decadencia del Entorno Uasdiano
Entorno: ambiente, lo que rodea.
El entorno es nuestro medio ambiente directo, es decir el medio ambiente con el que nos relacionamos en una circunstancia específica, en un momento dado. El entorno es nuestro espacio, lo consideramos propio y también lo compartimos. Este espacio es objetivo en tanto es un conjunto de aspectos materiales, y subjetivo en tanto se convierte en agente modificador, transformador.
Para los partícipes, activos o no, de la vida universitaria, el complejo de la UASD es más que la casa de altos estudios: es un hito en la ciudad, y en la conformación de la sociedad dominicana.
Su vínculo con fuerzas políticas es un indicador de la integración/dependencia –dañina o no- del Estado, y del gobierno. Esto ha sido así a distintos niveles durante su historia. Sin embargo, este vínculo nunca afectó su arquitectura, ya que los arquitectos responsables de su construcción tenían un buen nivel intelectual, y la capacidad de desarrollar obras bien concebidas.
Hoy en día, la capacidad de los arquitectos es, al parecer, tan deficiente que las obras realizadas últimamente en la Universidad son desparpajos formales. La concepción inicial es sustituida por piezas descompuestas y mutiladas.
Cierto es que la práctica de la arquitectura depende en gran medida de los aspectos económicos, pero un profesional de la arquitectura está en plena capacidad para enfrentar el trabajo con limitantes. Entonces, ¿por qué abandonarle simplemente en manos de ingenieros, o de arquitectos cuyas obras no salen de lo vulgar? ¿por qué recibir sugerencias de otros profesionales no calificados para trabajar en la edilicia?
Nuestra institución ha ido quedando al margen del pensamiento crítico y la evolución dialéctica, y por tanto gran parte de las decisiones del poder interno son negociadas sin consultar las escuelas y departamentos de la Universidad que deberían estar involucrados.
Las construcciones recientes y las no tan recientes (entre ellas el Economato, la mutilada Biblioteca, las salas virtuales, las Puertas de Acceso) se convierten en signos de deterioro antes que ser signos de mejoría, porque de qué sirve la educación contemporánea (con tecnología, información, bilingüismo, etc.) si nuestro entorno se construye en retroceso.
UASD = Universidad Autónoma de Santo Domingo
El entorno es nuestro medio ambiente directo, es decir el medio ambiente con el que nos relacionamos en una circunstancia específica, en un momento dado. El entorno es nuestro espacio, lo consideramos propio y también lo compartimos. Este espacio es objetivo en tanto es un conjunto de aspectos materiales, y subjetivo en tanto se convierte en agente modificador, transformador.
Para los partícipes, activos o no, de la vida universitaria, el complejo de la UASD es más que la casa de altos estudios: es un hito en la ciudad, y en la conformación de la sociedad dominicana.
Su vínculo con fuerzas políticas es un indicador de la integración/dependencia –dañina o no- del Estado, y del gobierno. Esto ha sido así a distintos niveles durante su historia. Sin embargo, este vínculo nunca afectó su arquitectura, ya que los arquitectos responsables de su construcción tenían un buen nivel intelectual, y la capacidad de desarrollar obras bien concebidas.
Hoy en día, la capacidad de los arquitectos es, al parecer, tan deficiente que las obras realizadas últimamente en la Universidad son desparpajos formales. La concepción inicial es sustituida por piezas descompuestas y mutiladas.
Cierto es que la práctica de la arquitectura depende en gran medida de los aspectos económicos, pero un profesional de la arquitectura está en plena capacidad para enfrentar el trabajo con limitantes. Entonces, ¿por qué abandonarle simplemente en manos de ingenieros, o de arquitectos cuyas obras no salen de lo vulgar? ¿por qué recibir sugerencias de otros profesionales no calificados para trabajar en la edilicia?
Nuestra institución ha ido quedando al margen del pensamiento crítico y la evolución dialéctica, y por tanto gran parte de las decisiones del poder interno son negociadas sin consultar las escuelas y departamentos de la Universidad que deberían estar involucrados.
Las construcciones recientes y las no tan recientes (entre ellas el Economato, la mutilada Biblioteca, las salas virtuales, las Puertas de Acceso) se convierten en signos de deterioro antes que ser signos de mejoría, porque de qué sirve la educación contemporánea (con tecnología, información, bilingüismo, etc.) si nuestro entorno se construye en retroceso.
UASD = Universidad Autónoma de Santo Domingo
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